Sarah Michelle Gellar considera que las ideas sobre los superhéroes siguen siendo “muy anticuadas”
Sarah Michelle Gellar saltó al estrellato de Hollywood de una manera muy especial. Ella se convirtió en la protagonista de Buffy La Cazavampiros y marcó un antes y un después en las historias para televisión, ya que el gran éxito de la serie provocó que las cadenas televisivas apostaran por las historias de ciencia ficción, fantasía y terror.
Una de las razones por las que Buffy fue tan innovadora a finales de los 90 y principios de los 2000, fue porque era de las pocas historias con una protagonista femenina que también era una heroína de acción.
Pero a 26 años de su estreno, Sarah Michelle Gellar considera que el género de la fantasía y ciencia ficción no es muy justo con respecto a la presencia de protagonistas femeninas. Y un ejemplo de esto son precisamente las películas de Marvel.
¿Fans de Marvel tienen una visión “anticuada” del género?
Al considerarse muchas veces como series o películas “de nicho”, Sarah Michelle Gellar le dijo a The Guardian que las producciones de género “son las producciones donde las mujeres pueden brillar y de verdad mantener a una audiencia interesada”.
Sin embargo, eso no ocurre con El Universo Cinematográfico de Marvel, en donde, a pesar de contar con una amplia gama de personajes, cuando se intenta presentar a una protagonista femenina, suele ser recibida con críticas y quejas de algunos/as fans, quienes consideran su presencia como “inclusión forzada”.
Al respecto, Sarah Michelle Gellar considera que es una muestra de la forma en la que piensan los/as fans de los superhéroes, quienes todavía asocian la idea de estas películas necesariamente como historias masculinas:
“Cada que una película de Marvel intenta incorporar un cast femenino, siempre es destrozada porque desafortunadamente la audiencia no las recibió muy bien.
Sigue habiendo esta mentalidad del “superhéroe masculino”. Una forma de pensamiento muy anticuada”.
Sarah Michelle Gellar, The Guardian
Sarah Michelle Gellar tal vez habla de las campañas de odio que recibieron cintas como Capitana Marvel y series como Ms. Marvel antes de que se estrenaran. Aunque este no es un tema exclusivo de las películas de superhéroes, otras producciones «de género», como Game of Thrones, han sido sometidas al mismo escrutinio por la forma en la que representan a sus personajes femeninos y la poca injerencia que tienen artistas femeninas tras bambalinas.
¿Encasillarse en un solo género?
Sarah Michelle Gellar, con el paso de los años, ha ido hablando poco a poco sobre el desgaste que sintió con su carrera y tratar de encontrar papeles diferentes y retadores. “Hacer 22 episodios a la temporada cansa a cualquiera, no sólo a los/as escritores. Ahora vivimos en un mundo donde la televisión puede ser de 8-10 episodios sin que te maten”.
Gellar protagonizó más de 144 episodios de Buffy. Y aunque su participación en Buffy hizo que rechazara papeles importantes en películas como The Fight Club, American Beauty, Gangs of New York y The Wedding Planner, ella está contenta con su trabajo, al grado en el que no quería regresar al género porque no había forma de superar lo que hizo con la Cazavampiros.
“Es muy difícil cuando haces algo como Buffy. No es que esté evitando el género, es que simplemente no puedo superar eso. Así que tiene que ser algo tan bueno como Buffy o mejor, o diferente, pero tiene que cuadrar”.
Sarah Michelle Gellar, Den of Geek
Una Nueva historia, una nueva generación
Sarah Michelle Gellar encontró esa historia en la nueva serie de Wolf Pack, una historia que continúa con lo que dejó Teen Wolf y que escrita por el escritor de la serie dosmilera: Jeff Davis: “[Davis] no quería simplemente a Sarah Michelle Gellar en una historia de hombres lobo, quería modernizar la historia y contar cosas con las que estamos lidiando ahora mismo”.
Y es que además de tener que batallar con hombres lobo, los protagonistas de la historia deben vivir con la ansiedad de las redes sociales y grandes incendios. Justo como Buffy trató tangencialmente situaciones como adicciones, bullying, salir del clóset, abuso doméstico y suicidio. Así que parece que todavía quedan esperanzas para revitalizar el género de ciencia ficción, fantasía y superhéroes.